Moraleja: No pierdas la cabeza por unas nalguitas.
martes, febrero 13, 2007
El cuento popular de la ranita
Había una vez una ranita que saltaba muy feliz entre los durmientes de la vía de un tren, y en eso llego otra ranita a cruzar hacia el otro lado de las vías y vio a la ranita que salta por entre las vías muy feliz y le dijo antes de irse, no te quedes aquí porque es peligroso. Pero la ranita hizo caso omiso y siguió saltando hasta que paso un tren a toda velocidad y le arranco las nalguitas, entonces la ranita se quedo ahí acostada pataleando y llorando "buju! buju! mis nalguitas, mis nalguitas!!! buju!" y en eso pasa otro tren a toda velocidad y le arranca la cabeza.
Moraleja: No pierdas la cabeza por unas nalguitas.
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3 comentarios:
Pero a veces es imposible evitarlo... la carne es debil... y la calentura canija :p
el diablo es puerco...
jajaja te la mamaste wey! está curada
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