lunes, diciembre 14, 2020

Retos

Ya era tarde, eran las 7:30 a.m. y estaba nublado, lloviznando, los arroyos corrían por los pluviales inundando la orilla de las banquetas, el agua se metía a hasta mis pies, hacia mucho frio, es hasta ahora una de las mejores mañanas del año, mi mirada inclinada hacia lo lejos, mi sonrisa atravesando mi pálido rostro y con esa musica para dormirse en el piso lleno de esperanza.
Salí a caminar, a correr, a meditar, a orar y agradecer. Respirar aire puro, soñar despierto porque los días ahora parecen mejores.

Existen vacíos inllenables?, heridas del alma que te someten por desiertos desolados, acaso incurables? Porque siguen doliendo? Qué debo hacer para sanarlos? Acaso no he atravesado suficiente? O es que lo merezco?

Tan poderosa mi presencia y tan frágil mi alma, ahora no puedo derrumbarme, debo seguir caminando arrastrando mi miseria y resolverme, amarme, curarme. Sé que estaré bien, solo hay que trabajar y aguantar y disfrutar el proceso. Me necesito bien, me necesito firme, me necesito fuerte, me necesito congruente.

No hay comentarios.: